Quizá entonces soltó la última lágrima de su vida
lágrima invisible a la indiferencia del cliente que subía sus pantalones
frente a los ojos asustados de este ser lloroso
cuya alma quebrantada no le permitiría llorar más.
Un reencuentro, pensamientos y para adelante
Hace 2 años
4 comentarios:
COSTUMBRE!!!
¡Oh, que triste sictuación! Pero, me pregunto, por qué a pesar de saber que la realización de determinadas acciones nos van a causar una sensación de insatisfacción, las seguimos haciendo.
Woooo que fuertes palabras y si tiene mucha razón por que a pesar de saber esas cosas las personas siguen haciendo lo mismo no hay cambios...
Título perfecto.
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