2 de febrero de 2009

Habla... ¿nos mojamos?

La reu bloguera terminó y al día siguiente, como ya se me está haciendo costumbre de los fines de semana, desperté en algún lugar que no es mi cama. La cama de L.A. me había albergado (gracias); Lola (la emo) y yo nos quitamos comiendo un helado (Inca Kola) que por cierto, está rico.

Eran las primeras horas del 1 de febrero, señal de que los carnavales ya habían empezado. Bajé del micro y comencé a caminar hacia mi casa. Aún eran las nueve y pico de la mañana así que caminé sin cautela ya que no creía que alguna fémina se levantara a esas horas a mojar a uno que otro tipo. Pero, como siempre, me equivoqué; ya estaba a una cuadra de mi casa escuchando musiquita y pensando en que debería de tener el hígado totalmente destrozado (eso que aún quedó una caja en casa e’ Lara) cuando sentí la espalada parcialmente mojada. Dos niñas desde su azotea habían osado hacer un tiro algo difícil, pero para mi mala suerte me dieron, a pesar de la distancia. Sólo las miré y seguí caminando; ni siquiera me molesté ya que de hacerlo, las pequeñas niñas habrían cumplido su cometido, joderme. Avancé unos cuantos metros y me reí, en realidad no me jodió mucho; es más, ese globazo me animó el día.

Los carnavales no me afanan tanto, pero son realmente divertidos. La ley dice que se puede dar hasta ocho años de cárcel por daños graves relacionados con los carnavales, pero no creo que mojar a alguna flaca que ande “apretadita” por la calle sea delito alguno. Ya sabes amiga, no uses ropa blanca por favor; que en la calle hay harto mañosón. Y tu “choche”, no seas abusivo puesss; no mojes a niñas indefensas, sólo a chicas “apretaditas”.

Ya me mojaron y hoy regresando de la universidad, vi a dos niños escondidos detrás de un muro esperando a una niña que se acercaba a ellos como si fuera la boca del lobo; la esperaban con un globo cada uno además de sus respetivas pistolas de agua que de pistolas no tienen nada. Apuré el paso y le dije:

-Ten cuidado, te van a mojar-
-Ah ya, me dijo-

La niña cruzó la pista corriendo y salvó su ropa seca; fácil tenía la misma edad de mi pequeña hermana por lo que no quise que la mojaran, ya que me imagino a mi pequeña jode-jode siendo “jodida” y me da cólera. Creo que fue mi buena acción del día. Ahora sólo esperaré el fin de semana para mojar a chicas “apretaditas”, no a niñas. Mientras tanto compraré mi talquito y mi pequeño betún, las municiones.

PD: Y a ti, ya te mojaron?

2 comentarios:

Andrés dijo...

Jajajaja, el 31 que fue mi ultimo dia en el brita habian unos chibolos con sus globos de agua jajaja... a mi aun no me han mojado, recien el miercoles salgo de mi casa y estare a eso de las 8:30 y 12:10 en plena calle ... asi que espero que no me mojen =/ jajaja cuidate

Lara Holmes dijo...

Odio este mes....y más cuando los chibolos mojan a personas adultas, o sea q jueguen entre ellos y q no molesten...Muchas veces he amenazado a varios, por poco y los hago llorar jojojojo...en fin...espero q pasen volando los días y se acabe de una vez este mes de shit... u_u